San Luis de Palenque, Casanare, Colombia, 1978. La literatura lo ha acompañado de múltiples maneras y en todos los momentos de su vida. Creció en el llano escuchando los relatos de los trabajadores y saboreando los cuentos infantiles que le contaba su padre. Estudió música, y siempre coqueteó con la narrativa. Quería contar historias como su padre y como algunos viejos llaneros que lo hipnotizaban con la magia de sus palabras, pero le fluyó hacerlo a través de la palabra escrita,que ha sido ––lo confiesa–– su principal herramienta de comunicación con el mundo, y su salvación.